1. Análisis
de los aspectos débiles y mejoras reflejadas en los escritos reflexivos.
Como aspectos débiles del portafolio podemos considerar, a
veces, el peso que damos a los distintos elementos que utilizamos para la
evaluación de nuestro alumnado. Normalmente nos centramos demasiado en las
producciones gráficas (los productos finales) y algo menos en el interés con el
que el alumno/a realiza la tarea (calificamos como mejor un trabajo “mejor
hecho” que otro “hecho con más ganas”).
Por otra parte creo que también es un aspecto débil, sobre
todo en alumnos/as de menor edad, la autoevaluación de su propio proceso de
aprendizaje. Están demasiado acostumbrados a ser evaluados y demasiado poco
acostumbrados a ser ellos los que tengan que reflexionar sobre su propio
aprendizaje, por lo que les suele costar este tipo de tareas.
Mis propuestas de mejora al uso serían dar más valor a los
aspectos actitudinales en el proceso educativo, en el portafolios, fomentando
el hacer las cosas con agrado, el ayudar al compañero… (fomentándolo a través
de una evaluación de estas actitudes y comportamientos). Y por otra parte, mi
propuesta de mejora relacionada con la autoevaluación va encaminada al
aprendizaje de dicha tarea (se aprende haciendo), por lo que sería adecuado que
el alumnado se autoevaluara a menudo y explicara su evaluación de forma
argumentativa.
2. Exposición
de retos y acciones futuras.
Como retos futuros creo que sería adecuado incluir un
número considerable de evidencias relacionadas con aspectos actitudinales, sin
dejar de lado las conceptuales claro, y dialogar sobre cómo se han sentido
haciendo tal o cual actividad y porqué, qué dificultades han encontrado, cómo
lo han solucionado, etc.
Relacionado con la autoevaluación, las acciones futuras van
en la línea de “hacer para aprender”. De dar al alumnado la oportunidad de
autoevaluarse de forma honesta, de que sean ellos los que se den cuenta de sus
avances y progresos, así como de sus dificultades y limitaciones, desarrollando
su pensamiento crítico.
3. Proyección
del desarrollo personal y académico.
La proyección académica iría
relacionada a prestar más atención a la inteligencia emocional y al estado
anímico a la hora de realizar las tareas (cuando digo más atención me refiero a
más atención de la que hasta ahora se ha venido prestando), factor que puede
mejorar mucho el proceso de aprendizaje en la escuela. En este sentido el portfolios puede ser un buen instrumento para abrir aspectos más emocionales en el ámbito académico.
Y relacionada con el desarrollo
personal del alumnado, desarrollaría su pensamiento crítico con relación a su
propia persona y a su propio proceso de aprendizaje (ya que tendría que
reflexionar sobre qué es lo que ha hecho, qué cosas debería mejorar…). En
definitiva, creo que sería bastante positivo para su crecimiento personal,
dando la oportunidad de ser protagonista de su propio aprendizaje.
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